Las siglas LI-FI provienen de las palabras “Ligh Fidelity”. Este término se escuchó por primera vez en 2011, por boca del ingeniero Harald Haas durante una conferencia en TED. Podemos definir esta tecnología básicamente como la transferencia de información a través de la luz. Sí, la luz visible. En principio parece algo sencillo: transmitir datos a la vez que iluminas una estancia. Y no solo es que sea capaz de transmitir datos a través de una simple bombilla led, sino que además lo hace a velocidades (supuestamente) 100 veces mayores que las acutales en tecnología wifi u otras tecnologías inalámbricas basadas principalmente en señales de radiofrecuencia. Realmente la base es la misma: una onda que transmite datos. La única deiferencia es que esta onda se encuentra a frecuencias entre 400 y 800 Thz, lo que supone que será visible para el ojo humano.

El objetivo es tratar de añadir un par de modificaciones muy sencillas y baratas a la luz para poder llevar a cabo el cambio de la forma más rápida posible. Actualmente ya es bastante sencillo: basta con insertar un modulador que se encargue de encender y apagar la bombilla miles de veces por segundo de forma que el dispositivo pueda interpretar esos “0 – 1” que emite la bombilla y, además, la bombilla estará iluminando la estancia. Las personas en principio no se darán ni cuenta: los parpadeos son imperceptibles al ojo humano (¿se pondrá a ladrar nuestro perro cuando mandemos un whatsap?).

Esta tecnología parece muy novedosa (y ojo, que realmente lo es) pero debemos saber que lleva ya estudiándose algo más de 100 años. Lo que pasa es que los resultados que se habían obtenido en un principio no eran suficientemente buenos como para poder hacer algo decente con esta tecnología. Cuando en sus inicios se usaban fluorescentes la velocidad se veía limitada a unos pocos Kbps. Ha sido la llegada de la tecnología LED a nuestros hogares la que ha permitido dar el gran salto: con un dispositivo LED (que se puede encender y apagar muchísimo más rápido que un fluorescente) podemos alcanzar velocidades inimaginables hasta ahora.

En este vídeo podemos ver una muestra de cómo esta tecnología transmite datos a una velocidad de 10 Mbps (por cierto, ese es Haral Haas):

(El enlace a youtube es este: https://www.youtube.com/watch?v=NaoSp4NpkGg)

Este vídeo fue subido en 2011. Mucho ha llovido desde entonces. En 2015 ya hablaban de velocidades cercanas a 500 Mbps. Actualmente, la teoría dice que con un dispositivo y un emisor bien refinados, podemos superar los 15 Gbps con facilidad.

Hasta aquí todo bien. Todo lo que os he contado hasta ahora es información que podéis trastear por la web. Creo que no hace falta saber nada más para conocer básicamente esta tecnología (no pretendemos crear un dispositivo Li-Fi, o eso creo). Si queréis más información sobre este tema podéis trastear aquí en Wikipedia. También podéis encontrar artículos en Omicrono, Xatakamovil, y este otro sitio que nunca había visitado hasta ahora. Estos son algunos de los que yo he leído para explicaros todo aquí, pero por supuesto Google es vuestro amigo y podrá daros muchísima más información. Ahora voy a contaros (desde mi punto de vista) qué cosas buenas y malas puede traer esta tecnología. Repito, desde mi punto de vista. A ver si abrimos buen debate.

Para empezar, el Li-Fi (por si no os ha quedado claro) es muchísimo más rápido que las redes convencionales, lo cual es su primera ventaja. Pero además tiene otra ventaja. Al utilizar el espectro visible (es decir, la luz convencional) no produce saturación en las ondas convencionales, lo que significa (más o menos y según en qué circunstancias) mayor cobertura, mayor ancho de banda disponible por usuario y, en definitiva, más y mejor disponibilidad. Considero que esto es algo relativo. Actualmente casi todas las tecnologías utilizan ondas en espectros similares, por eso viene bien retirar tráfico de las redes convencionales a otros espectros. Ahora bien, si todos los dispositivos empiezan ahora a incorporar esta tecnología llegará un punto en el que también estén saturados los espectros visibles. Por tanto esto es una ventaja a corto o medio plazo como mucho, depende cómo se desarrolle el panorama. Debo reconocer, en mi contra, que el ancho de banda posible en esta tecnología es muchísimo mayor que en las ondas convencionales, por lo que será mucho más difícil llegar al punto de saturación, pero desde luego difícil no es sinónimo de imposible.

Otro factor que ya os he mencionado es el de poder iluminar una habitación a la vez que se transmite información. Y sí, de primeras es una ventaja. Pero, ¿y si no te interesa encender la luz? ¿No podrás enviar nada? ¿Qué será de esos piratillas que dejan sus máquinas toda la noche descargando contenido de dudosa legalidad? Pues sí, lo que yo creo es que por muy bien que se pinte el tema, eso de tener la luz encendida para transmitir datos no siempre es bueno.

Y esto me recuerda otro problema. Al funcionar con luz, si algo se interpone entre el emisor y el receptor se perderá la señal. Si tu iPhone lleva Li-Fi, en cuanto pongas la mano cortarás la conexión. Si te lo metes al bolsillo, también. Por tanto ¿es esta la mejor manera de tener el dispositivo permanentemente conectado? Desde luego que no.

En lugares muy concurridos sí puede ser útil. Ya que, por ejemplo, en un aeropuerto, para favorecer el ancho de banda, es posible que la condición para tener acceso a Li-Fi sea sacar el móvil. Total, lo ibas a sacar igualmente ¿verdad? Y si lo guardas, entonces seguirás tirando de tu plan de datos. Y ya no solo los usuarios del aeropuerto. Todos los sistemas que estén conectados por Li-Fi de forma segura sin que nada interrumpa el haz de luz para la conexión gozarán de una velocidad enorme, lo que favorecerá sin duda el entorno de trabajo en casos concretos como aeropuertos, bancos, etc.

Otra ventaja que podría darse según mi parecer, aunque en muy pequeña posibilidad, es la facilidad de desconexión. Supongamos que un personaje sitúa una bomba en un aeropuerto y el dispositivo detonador, para funcionar a máxima velocidad, se conecta por Li-Fi. Repito, seguramente no se dé el caso, pero ¿y si se diera?. En caso de aviso por bomba, una solución muy sencilla para cortar toda la comunicación en la zona afectada sería apagar las luces. Realmente, parece demasiado sencillo para ser verdad.

En conclusión (que ya he escrito demasiado). Creo que sí, es algo realmente útil, pero solo para momentos puntuales o para máquinas concretas. En el caso de los dispositivos móviles, en cuanto pierdan el contacto con la luz dejarán de recibir información y, además, seamos claros: ¿necesitas tanta velocidad para mandar un mensaje? Ahora bien, si tienes tu ordenador en el sótano y quieres jugar al WOW con un ping tan bajo como si de un área local se tratase, puede ser muy útil. Pero espero que no seas de los que te gusta jugar a oscuras. Otro uso que realmente le veo es para momentos puntuales en los que queramos descargar o cargar a la red una gran cantidad de datos. Muy sencillo: un sistema Wifi común para todas las conexiones. Si alguien quiere ver una película, por ejemplo, se conecta al lifi, se baja la película en 2 segundos sin saturar durante un determinado tiempo el Wifi y después funciona sin conexión. O un juego: te conectas al Wifi para bajarte tu GTA V de Steam y te bajas los 60 GB en un par de minutos en lugar de tener la red Wifi saturada todo el día. Y luego, para comunicaciones normales en las que le ancho de banda es sobrado, podremos utilizar comunicación convencional. Ese es el enfoque que realmente le veo: la ayuda en las sobrecargas puntuales. Esto desde el punto de vista casero. En las empresas la cosa cambiará.

Por último quiero añadir una puntualización. Todo esto de que las redes sean cada vez más rápidas incluso hasta niveles innecesarios está muy bien y me gusta, pero le veo un inconveniente. Este inconveniente no es propio de Li-Fi solamente, sino de todas las tecnologías que produzcan un gran aumento en la velocidad. Y es sobre la potencia de nuestros Routers. Actualmente tenemos una potencia que, si seguimos este ritmo de crecimiento de la velocidad de cada dispositivo y, además, del aumento de dispositivos por cada usuario, necesitaremos cada vez puntos de acceso más potentes para gestionar todo este tráfico. ¿Qué solución llegará para no tener que tener un i7 en nuestro router que encarezca notablemente nuestra factura? Espero haberos servido. Un saludo.